lunes, 17 de octubre de 2016

Constantes

No paren, aunque los mares secos
se vuelvan un puro sueño
desconcertado.

Aunque los llantos sean más que
los rotos
pañuelos del consuelo.

No paren.

Hasta que las velas no ardan

o hasta los complejos de abstinencia.

No dejen de hacer, de llorar, de reír o
lanzar la foca.

No paren. No
paren.

Hasta que la esperanza sea pan
de cada día y
de cada árbol noble abonado.

Hasta que rías, hasta que sueñes, hasta
que la mentira sea
un ahogo que ya se
marchó. Hasta que
el grito se infunda valor y siembre
amores dulces y la
vida.

Por favor, no pares de hablar

palabras carne
manos que rezan,
canciones dulces.
Cosa de no parar
vivir con vida para todos.

domingo, 9 de octubre de 2016

Descarga

Pero si íbamos tan bien.

No existirá el día de la paz,
la jornada amable,
un minuto siquiera?

Pero siento que estoy llamado
a ser hombre de
tormentas.

Sólo eso, y las tormentas
lanzan a todos lados los
corazones que vienen, para bajar
una fiebre molesta
una vida sin luz.

Necesito la paz,
encarnada. Sino,
noche

lo siento.

lunes, 26 de septiembre de 2016

Horizontes, otros, todos

Escuchando la vida, sus signos y propuestas de existencia, son uno de los momentos más cruciales a la hora de definir el camino que cada uno de nosotros emprende. Y siempre ese camino involucra un otro, ese andar se transforma en acciones que involucran un nosotros.

Esta sociedad de rendimiento nos enceguece ante quien tenemos en frente. Lo miramos en un plano inferior, de utilidad sin más, y las relaciones humanas pasan de ser en dimensión fraterna a una dimensión productiva, de simple negocio. Eres importante en cuanto sirves al impulso egoísta de un yo, que se vuelve ídolo de absoluta envergadura.

Tenemos que perdernos en el otro de todos los hombres, para así vernos en identidad propia. No es perder la propia persona y confundirse, sino que, al considerar al otro, me fortalezco en plenitud, puedo mirar sin temor a los otros-Otros. Al sentirme hermano de cada uno de los seres humanos, me reconozco humano y digno.

Lázaro y el rico (cf. Lc 16, 19-31) se vuelven un llamado, a escuchar a Jesús y de actuar en configuración y concordancia a su mensaje y obrar. Lo que escuchamos en nuestra vida de de fe, lo que recibimos en nuestras parroquias, catequesis, etc., debe encarnarse y volverse un acto de amor sin límites, desbordante, loco por los que son explotados y sufren la esclavitud, en todos sus amplios aspectos. Llevar a todos al seno de Abraham, porque toda escatología y esperanza no tiene sentido si no comienza hoy. El Reino se nos ofrece ahora, es ahora donde debemos vivirlo, acogerlo, y convertir esa acogida en exigencia y acción por un mundo más justo y fraterno. No volverse el Rico (Epulón, como se decía antaño), terminar enterrado. Olvidarse del otro para dar rienda suelta al onanismo existencial del lujo, o, peor aun, usar al otro para volverse cada vez más ensimismado en su poder, significa un espacio de alejamiento, de insalvable abismo. Significa enterrarse, morir.

Tenemos una responsabilidad, vivir en amor y fraternidad, y volcar la vida a unir los horizontes, para que todos podamos compartir la alegría de sabernos hijos del mismo Padre. Y no tomarlo como un deber de militar, sino como un hacer lleno de gozo! Quien cree en el Señor de la Vida, quiere donar la vida por los demás, enfrentar todo obstáculo que impida la dignidad de todo ser humano, su libertad creativa.

El desafío: reconversión, pasar de la mentalidad "epulona", a ser servidores que levantan a los Lázaros de la vida.

lunes, 19 de septiembre de 2016

Cuándo entenderemos

que la patria son los hombres
que labran la tierra
y la fecundan con canciones, poesía,
el sol y la manos, las aguas y las conversaciones?

Es la esperanza la que mueve los
corazones herreficados.

Los fusiles son la tentación
del amor fácil y estruendoso,

son el amor propio.

Amar es dar
es mar y cordillera, es espacio para otros
de otros que bailan para hacer las cosas más
únicas, alegres, mejores.

Es la oración de la mañana, de quien mira hacia el metro cuadrado,
y se da cuenta que el metro es un torbellino de
historias.

La patria no es más que un corazón generoso, sin límites,
sin fronteras presuntuosas ni marchas de soldados
sangre de ofrenda de poderes y de dinero fresco
rociado de hemoglobina.

Es sólo el hijo que llora, la madre que mece,
un beso, un abrazo, un espacio que no existe
porque sin el otro, nadie surge
sino como un numeral.

Es un pan que se ofrece calientito, como
el alma, como el corazón generoso.
Como vino fresco.

Amor, eso falta. Más amor, menos fusiles.

Ser-para-los-demás.




domingo, 28 de agosto de 2016

Acaraciones breves (y un mensaje de igual extensión)

Escribir se ha vuelto un no-acto, una posibilidad dentro de tantas que no se ha concretado; tan vano se ha vuelto pensar siquiera en resucitar esta página.

Pero el deber manda, o más que eso: el amor por dejar estampadas unas palabras con algo de Java, Internet y las imaginaciones que me atascan. no es, evidentemente, deber-por-deber, sino un deber-por-querer. Y eso, sin duda, no es lo mismo.

No pretendo alargarme, el remedio debe funcionar en pequeñas dosis. Si se inocula todo de un viaje, puede provocar síntomas y una enfermedad que, sin duda, será peor que el medicamento aplicado.

Con humildad, de a poquito, vamos reviviendo este blog. Perdón por la pereza: hay días que siento que hago mis notas por una sed de autorreferencia radical (no creo que otras personas las lea, así es mi fe en este canal). Pero, por la inercia de las ganas que estaban carcomiendo mis entrañas, menester es arrancar de nuevo.

Antes de cortar comunicaciones, consejos de vida: ser servidores, ver al otro más allá de un horizonte aplanador, sino a alguien en quién volcar el Eros de la vida apasionada por los otros. Entrar en la casa del pueblo, conocerlos y darles lo mejor de sí, más aún, la vida entera. Crucificarse y resucitar por los hombres y mujeres que necesitan de ser colocados en los planos de visión, muchos de los cuales son esclavos de una vida y de un orden de cosas que los hace sentirse culpable de los fracasos y desaires de su vida, siendo en realidad el fruto podrido de inusticias, esclavitud, muerte y dolor.

Mirar al mundo con amor, dar de sí lo mejor, y ver con los ojos del maestro de Nazaret, sin normativismos, sino en clave pneumatológica. Dar razón de la esperanza no es sólo explicar intelectualmente una condición de creyente, en clave de convencimiento racional; se trata de de-mostrar, con hechos y palabras encarnadas, lo visto, lo oído.

Eso. Fin del comunicado

sábado, 14 de mayo de 2016

Llover

Yo no recuerdo nada
solamente aquel sonido de una lluvia llena de dolor
pero a la vez hoy
el agua refrescaba el sonido impertérrito de un recuerdo imborrable
que se convirtió en el torrente más limpio
en el espacio más amoroso
en el dolor menos intenso

Pero no puedo dejar de negar que aquella lluvia sirvió para
dejar entrar en el dolor acérrimo a aquel Dios
que me ha sanado
y no puedo dejar de decir que aquella lluvia
fue el torrente que me empujó a decir que
la vida no es la vida
sino más que la vida.

Que la vida es un camino andado es un golpe de
puño contra la historia
pero aquella
historia que se presenta infame
que se presenta insoslayable

que la historia es menos que historia sino aquel
nefesh que se convirtió prontamente en
el motor de lo que queremos para este mundo.

Me duele
me duele el mundo pero
la lluvia llegará,

con su fuerza para arrastrar
con su agua para sanar.

Y la historia será amor.

viernes, 6 de mayo de 2016

Eclosión

Tormentas a lo lejos
eclosión de indeclinables
aromas y una otra explosión
de angustias ante el mar.

Leviatán me espera
pero no le daré un
mar, mi mar

sólo estrellas.

No me maten la mar,
Dios me ha sacado como
escamas,
como las que flotan hoy
con la muerte.

Yo y el mar
el mar me limpió.